El desarrollo de videojuegos no solo implica horas de programación y diseño, también requiere extensas pruebas para garantizar que el producto final sea divertido y accesible para los jugadores, sin embargo, incluso los grandes genios de la industria pueden enfrentarse a momentos frustrantes durante este proceso. Shigeru Miyamoto, la legendaria mente detrás de franquicias icónicas como Super Mario, Zelda y Donkey Kong, compartió una anécdota que refleja esta realidad, donde su propio hijo fue parte de las pruebas de juego de Super Mario 64 y dejó al creador cuestionándose ciertas cosas.
La información fue rescatada de entrevistas de 1997 compiladas por Shmuplations, en las que Miyamoto detalló el proceso de desarrollo de Super Mario 64, un juego que marcó un antes y un después para Nintendo al llevar a Mario al mundo de las tres dimensiones. Durante las pruebas, un grupo de diez estudiantes de secundaria, entre los que se encontraba el propio hijo de Miyamoto, jugó el nivel inicial del juego, Bob-omb Battlefield.
Lo que no esperaba la mente detrás de Mario era que la tarea de observar estas sesiones resultara ser mucho más desafiante de lo que había anticipado. Según cuenta Miyamoto, mientras veía a su hijo intentar una y otra vez escalar una colina que claramente era inalcanzable dentro del juego, pensó:
“¡Dios mío, ¿es que este niño tiene cerebro?”
A pesar de la frustración inicial, el resultado general de la prueba fue positivo, ya que los jugadores calificaron la experiencia como divertida y expresaron su deseo de seguir jugando, lo que llevó al equipo de desarrollo a una conclusión crucial: no siempre se trata de ganar o avanzar en el juego, sino de disfrutar del viaje, incluso cuando el progreso es limitado.
Este enfoque marcó un cambio significativo en la filosofía de diseño de Nintendo dado que Miyamoto explicó que, tradicionalmente, se consideraba que un juego solo era divertido si podía ser completado con éxito. Sin embargo, las pruebas de Super Mario 64 demostraron que un juego puede ser igualmente entretenido si permite a los jugadores explorar y experimentar libremente.
“Diseñamos el juego también para aquellos que simplemente quieren caminar y observar todo, no solo para quienes buscan avanzar rápidamente al siguiente nivel”, afirmó Miyamoto.
El impacto de este enfoque puede verse aún en los juegos de Nintendo, donde la exploración y el descubrimiento suelen ser componentes clave de la experiencia. Historias como esta no solo subrayan la importancia de las pruebas de juego, sino también muestran que incluso los genios creativos tienen momentos de frustración y aprendizaje, lo que finalmente lleva a la creación de juegos que trascienden generaciones.
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Otro hallazgo insólito de aquellos que sorprenden y generan una gran envidia al mismo tiempo, ha sido compartido en Reddit. Un usuario de aquella plataforma asegura que, inicialmente había comprado un grupo de “Game Boys extraños” en una venta de garaje, ha descubierto que se trata de kits de desarrollo (devkits) extremadamente raros, los cuales podrían costar una fortuna.
