BioWare, desarrolladora de videojuegos reconocida por títulos icónicos como Dragon Age: Origins y Mass Effect, sigue intensificando una reciente crisis tras el lanzamiento de Dragon Age: The Veilguard. Juego que no logró cumplir con las expectativas ni del público ni de la crítica, ha desencadenado una ola de despidos masivos en el estudio, propiedad de Electronic Arts (EA).
Según los reportes, BioWare se enfrenta a una nueva reestructuración, justo después de la salida de Corinne Busch algunos días atrás, quien se desempeñó como directora de The Veilguard, dejando el estudio tras 18 años de trayectoria.
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Y ahora, a ella se suman veteranos como Trick Weekes, con dos décadas en BioWare, y otros empleados como Michelle Flamm, Karin West-Weekes, Jen Cheverie y Ryan Cormier. “Ahora estoy buscando una nueva posición de escritura/narrativa. Ha sido un privilegio trabajar con tantos desarrolladores increíbles durante mis 20 años en BioWare, y apreciaré los recuerdos de las maravillosas personas de la comunidad que he conocido en el camino. Gracias a todos”, indicó Weekes en la red social Bluesky.
Una situación que lamentablemente, no es nueva para BioWare, que en la última década ha visto su reputación en tela de juicio tras los fracasos comerciales y críticos de Mass Effect: Andromeda y Anthem. Dragon Age: The Veilguard representaba una oportunidad de redención, pero la apuesta no dio frutos. Juego que como hemos dicho anteriormente en otros reportes, desde sus primeras etapas de desarrollo, generó un intenso debate. Una de las controversias más destacadas surgió en 2024, cuando se anunció que el juego permitiría a los jugadores personalizar sus personajes con cicatrices representativas de cirugías de reasignación de género.
Para terminar y debido a todo esto, el futuro de BioWare es incierto y la llegada de Mass Effect 5 podría ser su última oportunidad para demostrar que aún tiene un lugar en la industria. Sin embargo, el panorama no es alentador ya que para muchos jugadores, si el estudio llegara a cerrar sus puertas definitivamente, no sería una verdadera sorpresa.
Acciones de EA se desploman tras confirmar que Dragon Age: The Veilguard vendió menos de la mitad de lo esperado, llegando solo a 1.5 millones de jugadores
La gigante de los videojuegos Electronic Arts (EA), ha revisado a la baja sus proyecciones financieras para el año fiscal que culmina el 31 de marzo de 2025, reconociendo que el lanzamiento de Dragon Age: The Veilguard no alcanzó las metas comerciales establecidas. La compañía confirmó que el RPG desarrollado por BioWare atrajo a aproximadamente 1.5 millones de jugadores durante el último trimestre, cifra que contrasta con las expectativas iniciales de alcanzar los 3 millones.
La cifra proporcionada por EA incluye a los usuarios que accedieron al juego a través de EA Play, el servicio de suscripción de la empresa, lo que sugiere que las ventas directas del título podrían ser considerablemente menores. Como consecuencia de este rendimiento, EA ahora estima que las reservas netas del tercer trimestre se situarán en torno a los $2.215 millones de dólares, ajustando también el rango proyectado para el año fiscal completo a una rango entre los $7.000 y los $7.150 millones de dólares.
