Después de reportar pérdidas por alrededor de $40 millones USD durante su pasado informe cuatrimestral, THQ tomó drásticas decisiones para atender el asunto: cerrar tres estudios, lo que deja sin trabajo a alrededor de 200 personas.
THQ Phoenix, THQ Australia, y Bluetongue fueron las víctimas, siendo este último, el estudio responsable de la concepción de la pintoresca saga de Blob, la cual promedió un nada despreciable 77 de calificación crítica entre sus dos entregas. El movimiento también deja fuera de combate a la intrascendente pero longeva franquicia MX vs. ATV, cuya última edición ha despachado menos de 250 mil copias.
La compañía enfatizó que el movimiento responde a una urgente necesidad de dejar atrás los títulos para niños y las propiedades basadas en películas. Con esto, THQ se refiere a juegos como Paws & Claws: Pampered 2, Sponge Bob Squiggle Pants, Rio y Fantastic Pets, los cuales resultaron un auténtico fracaso comercial, sumando sólo 60 mil copias vendidas, entre todos.
La noticia de estos cierres se suma a una andanada de traspiés para la compañía, entre los que destaca la descontinuación de la franquicia Red Faction, cuya reciente entrega, Armageddon, fue también una decepción, despachando menos de 100 mil unidades.
Dicho lo anterior, THQ dependerá casi por completo de tres sagas: Saints Row, WWE y Darksiders, y de cinco estudios: THQ Montreal, Relic, Volition, Vigil Games y THQ San Diego.
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