En algo que quizás podría ser catalogado como una “cripto estafa”, con ciertos matices, un conocido director de Hollywood recibió $61,2 millones de dólares por parte de Netflix, para una nueva serie, pero lo invirtió en criptomonedas y automóviles, para además no entregar ni un solo episodio.
Hablamos del director Carl Rinsch, quien entre sus trabajos anteriores se encuentra la película de samuráis "47 Ronin" protagonizada por Keanu Reeves, quien hizo este trato multimillonario con Netflix para una nueva serie llamada "Conquest", cuyos derechos Netflix adquirió en 2018. Producción al mando de Rinsch, el cual despertó el interés de importantes plataformas de streaming, donde Netflix finalmente ganó la competencia, comprometiéndose a pagar 61.2 millones de dólares en varias entregas, y otorgándole a Rinsch el derecho al corte final.
Pero había ciertos signos de advertencia que la gigante del streaming no tomó en cuenta, incluyendo disputas legales con inversores anteriores y la falta de un guion. Keanu Reeves, quien se hizo amigo de Rinsch durante el rodaje de "47 Ronin" e invirtió en "Conquest", no pudo salvar el acuerdo. En marzo de 2020, Rinsch persuadió a Netflix para que le transfiriera otros 11 millones de dólares, a pesar de que la financiación ya se estaba estancando. De esa suma, transfirió 10.5 millones de dólares a su cuenta personal y realizó inversiones arriesgadas, incluida la compra de Dogecoin por valor de 4 millones de dólares.
La filmación comenzó en São Paulo, Brasil, pero debido a quejas sobre el comportamiento de Rinsch, se trasladó a Uruguay y Budapest. Según informes, Rinsch se volvió irracional, gritaba y mostraba irritabilidad excesiva. Pero a pesar de las pérdidas de 5.9 millones de dólares, la inversión en criptomonedas resultó rentable, y Rinsch pudo retirar 27 millones de dólares en mayo de 2021. Con ese dinero, fue de compras, adquiriendo relojes de lujo, muebles y ropa de diseñador, así como un Ferrari y cinco Rolls-Royce, afirmando que eran necesarios para "Conquest".
La serie nunca se completó y Netflix informó a Rinsch que la financiación se suspendía. Rinsch acusó a Netflix de incumplimiento de contrato y exige al menos 14 millones de dólares en daños. Netflix argumenta que Rinsch no cumplió con los hitos de producción acordados. Actualmente, ambas partes se encuentran en un proceso de arbitraje confidencial. El futuro de "Conquest" es incierto y es poco probable que la serie se publique en el corto plazo. A pesar de múltiples solicitudes, Rinsch aún no ha emitido comentarios.
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