Aunque The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom fue lanzado en mayo de 2023, los detalles sobre su creación continúan sorprendiendo y enamorando a sus fieles seguidores. Durante la reciente conferencia CEDEC en Japón, Nintendo compartió información clave sobre el desarrollo del juego, destacando especialmente la implementación de una carga sin pausas, crucial al explorar las profundidades del juego.
A diferencia de su predecesor, Breath of the Wild, que se desarrollaba en un mundo plano, Tears of the Kingdom ofrece una experiencia tridimensional mucho más amplia. Esto incluye la incorporación de islas celestiales y áreas subterráneas, lo que presentó nuevos desafíos en términos de carga de datos. Uno de los mayores retos fue asegurar una transición fluida entre la superficie y las profundidades. En las primeras etapas del desarrollo, los tiempos de carga eran tan largos que el juego incluso llegaba a congelarse.
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Según explicaron los desarrolladores (vía Famitsu), para resolver este problema, el equipo de Nintendo utilizó herramientas de análisis de rendimiento para identificar los objetos que más tiempo requerían para cargarse. Estos elementos se cargaron durante momentos de menor actividad, mientras que otros datos se pospusieron hasta que fueran realmente necesarios. Además, se redujo la cantidad de archivos que debían cargarse simultáneamente al identificar objetos y terrenos que no serían visibles para el jugador, optimizando también las texturas.
Finalmente, Nintendo implementó una estrategia de carga anticipada. Al detectar que el jugador se acercaba a un posible punto de entrada a las profundidades, el juego comenzaba a cargar los archivos necesarios. Gracias a una combinación de estas técnicas, Tears of the Kingdom logró ofrecer una experiencia de juego sin interrupciones, incluso al realizar transiciones entre diferentes niveles.
El mercado de videojuegos en japón tuvo un fuerte crecimiento en 2023 con la Nintendo Switch como protagonista
Hablando de Japón y Nintendo, un reciente informe de Kadokawa ASCII Research Laboratories destaca que el mercado de videojuegos en Japón experimentó un crecimiento sostenido durante 2023. Las ventas de consolas y juegos para PC fueron las protagonistas, donde registraron un incremento del 27.5% en ventas respecto al año anterior, con la PlayStation 5 y la Nintendo Switch como principales impulsoras de este crecimiento.
A pesar de llevar siete años en el mercado y con una sucesora en camino, la Switch logró vender 2 millones de unidades en tan solo tres meses, según los resultados financieros del primer trimestre de Nintendo. Las ventas de juegos para PC también mostraron un notable crecimiento del 24.9%. Este incremento en la adquisición de hardware se tradujo en un aumento del 2.8% en el número de jugadores activos en Japón, alcanzando aproximadamente los 55.5 millones de personas, incluyendo jugadores de consolas, PC y móviles.
Por otro lado, el mercado de juegos móviles en Japón experimentó una disminución por tercer año consecutivo, con una caída del 0.7% en comparación con 2022. No obstante, los ingresos totales por contenido de juegos en plataformas en línea continuaron creciendo año tras año, registrando un aumento del 3.9% en 2023.
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