Aunque Blue Prince llegó a Steam como una sorpresa a inicios de abril, su éxito no fue producto de la casualidad. El juego, un curioso cruce entre aventuras de puzzles y mecánicas tipo roguelike, estuvo en desarrollo durante ocho años bajo condiciones extremadamente exigentes para su creador.
Detrás de este inesperado fenómeno está Tonda Ros, un desarrollador que invirtió todo en su proyecto: trabajó jornadas de 80 horas semanales, vendió su auto y sobrevivió con recursos mínimos. Blue Prince actualmente disfruta de una valoración “muy positiva” en Steam, con elogios tanto de jugadores como de desarrolladores.
Una historia de sacrificios y perseverancia
En una reciente conversación con Bloomberg, Tonda Ros relató cómo inició su travesía en 2016, cuando descubrió que podía desarrollar juegos usando herramientas como Unity, sin necesidad de experiencia previa en programación. Durante tres años trabajó solo hasta que sumó a Davide Pellino como director artístico para darle forma al apartado visual.
Para financiar el proyecto, Ros usó sus ahorros y los ingresos de su sitio Mythic Spoiler, donde publica cartas de Magic: The Gathering. A pesar de ello, tuvo que desprenderse de su auto y reducir al mínimo sus gastos, dedicándose casi exclusivamente a desarrollar y a consumir películas y videojuegos.
Puedes leer: Desarrollador dejó su trabajo para crear el MMORPG de sus sueños y, dos años después, revela su primer gameplay
En 2021 ya existía una versión jugable de Blue Prince, pero Ros decidió dedicar cuatro años más a perfeccionar el balance del juego. Su meta era lograr que la generación de habitaciones y la progresión fueran siempre satisfactorias, en un proceso que llamó “ampliar el pozo” para mantener la frescura de la experiencia.
Un futuro que todavía se está escribiendo
Con el lanzamiento de Blue Prince el pasado 10 de abril, Ros ha cosechado una respuesta mayormente positiva, aunque todavía planea seguir mejorando el juego. En los próximos meses pretende añadir nuevos contenidos y pulir aún más su proyecto antes de embarcarse en una nueva aventura creativa.
La historia de Blue Prince no solo refleja el éxito de un juego indie bien trabajado, sino también el costo personal que muchas veces implica perseguir un sueño. A pesar del riesgo y el sacrificio, Tonda Ros demuestra que la pasión puede abrirse camino incluso en un mercado saturado.
Exjefe de PlayStation está de acuerdo en que algunos juegos son muy largos: “No necesito que pases 100 horas en mi juego”
A medida que los videojuegos se vuelven cada vez más largos y complejos, algunas voces de peso dentro de la industria comienzan a cuestionar si esta tendencia realmente beneficia a los jugadores.
Shawn Layden, exdirector de PlayStation, ha planteado una crítica directa contra los títulos que se extienden por decenas de horas sin una buena razón, apostando en cambio por experiencias intensas y finitas que no exijan tanto tiempo de vida a sus jugadores.
