Durante una mudanza, un jugador de World of Warcraft hizo un hallazgo inesperado: seis ediciones de colección originales de las expansiones The Burning Crusade y Wrath of the Lich King, olvidadas en su ático durante 17 años.
La revelación causó revuelo entre la comunidad, no solo por la rareza de los objetos, sino también por el motivo detrás de su compra masiva.
El hallazgo de una verdadera cápsula del tiempo
El usuario de Reddit conocido como No_Shift1199 compartió una imagen donde se ven tres ediciones de colección de cada expansión, completamente selladas. Comentó sobre el descubrimiento diciendo: “Hallazgos encontrados en el ático durante la mudanza”.
Cada edición de colección incluía varios objetos especiales: una DVD “detrás de escenas”, un CD con la banda sonora, un libro de arte de tapa dura, mazos de cartas para el juego de cartas intercambiables, una mascota dentro del juego y un mousepad. En su momento, estos paquetes eran muy codiciados entre los fans.
Las reacciones de la comunidad no se hicieron esperar
La sorpresa de la comunidad no tardó en llegar. Los usuarios, intrigados, se preguntaron por qué alguien compraría tres ediciones coleccionables de dos expansiones y las dejaría olvidadas tanto tiempo, mientras otros aprovechaban para mostrar interés en comprarlas.
Otros comentaron que, aunque no se trataba de algo accesible para todos, si no se pensaba conservar todas las ediciones (excepto una para uno mismo), podrían venderlas por un buen precio.
Un plan de multiboxing inspirado en EverQuest
El propio No_Shift1199 dio más contexto sobre la historia detrás del hallazgo. Explicó que originalmente había comprado cinco cajas de cada expansión, con la intención de hacer multiboxing en WoW, una estrategia que había aprendido y disfrutado en EverQuest. Sin embargo, terminó utilizando solo dos de las ediciones.
Reflexionando sobre su decisión pasada, confesó con humor: “Era joven, soltero, estúpido y un sin vida”. Su historia ofrece un vistazo nostálgico a una época en la que la pasión por los MMORPGs llegaba a extremos curiosos y muy costosos.
Padre esperó 13 años para poder jugar World of Warcraft con su hijo, pero cuando llega el momento, el niño es baneado de inmediato: “ha sido lo peor que podía pasar”
Las relaciones de los padres gamers con sus hijos siempre dejan historias fascinantes y algo entretenidas, como la de un jugador quien durante más de una década, tuvo el anhelo de compartir su pasión por World of Warcraft (WoW) con su hijo.
Sueño que vio cómo se volvió realidad, pero por tan sólo unos instantes, ya que el joven jugador fue expulsado del juego con una sanción permanente, desencadenando un inesperado y frustrante incidente.
