Amazon es una de las plataformas de compra en línea más utilizadas del mundo, conocida por su sistema de envíos rápidos y garantías de compra. Sin embargo, un reciente caso ha generado preocupación entre los consumidores, pues incluso comprando directamente a Amazon, pueden ocurrir fraudes.
El canal de YouTube HardwareBusters necesitaba un procesador para su equipo de pruebas y decidió adquirir un Ryzen 7 9800X3D en Amazon Alemania. Pagó 478,20 euros(520 dólares aproximadamente) por la CPU, pero al recibir el paquete, descubrió que se trataba de una falsificación burda y de escaso valor.
Un fraude en una compra directa
El caso es especialmente alarmante porque la compra se realizó directamente a Amazon y no a un vendedor externo. Esto significa que no hubo intermediarios, un método que los compradores suelen considerar seguro para evitar fraudes. Sin embargo, en este caso, la estafa ocurrió a pesar de ello.
Al abrir el paquete, el YouTuber se sorprendió al encontrar un AMD FX-4100 en lugar del esperado Ryzen 7 9800X3D. Este procesador, lanzado en 2011, tiene un valor de apenas unos 10 dólares en el mercado de segunda mano.
El engaño era evidente por las diferencias físicas entre ambos modelos, como el disipador de calor y la presencia de pines en la base, algo incompatible con las placas base AM5 modernas.
Posibles riesgos y consecuencias
El fraude no solo implicó una pérdida económica momentánea, sino que pudo haber causado daños mayores. Si el procesador falso se hubiera instalado en una placa base AM5, el sistema podría haber quedado inutilizable, ya que el modelo falsificado usa una arquitectura incompatible.
Afortunadamente, el YouTuber identificó el problema antes de instalar la CPU y solicitó un reembolso a Amazon. La plataforma aceptó la devolución y aseguró que procesará la restitución del dinero en las próximas semanas. Aun así, el caso deja dudas sobre los mecanismos de control de calidad de la empresa.
La vulnerabilidad en las compras en línea
Este incidente expone un problema recurrente en el comercio electrónico: incluso grandes plataformas como Amazon pueden ser víctimas de fraudes internos o fallos en sus sistemas de verificación de productos. Aunque el sistema de reembolsos protege al comprador, la experiencia demuestra que no siempre es suficiente para evitar inconvenientes y pérdidas de tiempo.
Por ahora, el caso sirve como advertencia para otros compradores de hardware, quienes deberán verificar cuidadosamente sus productos incluso si compran desde fuentes aparentemente confiables.
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Algo que un jugador vivió pero para su sorpresa, con un final excelente, ya que luego de enviar su GPU dañada para reparación, la marca le envió de vuelta una con mejor rendimiento.
