¿Quién creería que meter un mono en una bola podría obtener los resultados de Monkey Ball? Esta serie ha sido exitosa y SEGA aprovecha la oportunidad del lanzamiento del Nintendo 3DS para entregar una nueva secuela. ¿Será Super Monkey Ball 3D el mejor de la saga o terminará siendo sólo más de lo mismo?

Las características del título suenan bastante bien en papel, pero nada más. El paquete incluye el juego que todos conocen y que se ha hecho famoso por ser brutalmente adictivo y divertido, y en esta ocasión se agregan otros dos modos: Monkey Race (carreras con karts) y Monkey Fight (un juego de peleas hasta de cuatro personajes).

Monkey Ball el modo clásico donde controlas a un mono dentro de una bola para llevarlo a la meta final juntando bananas en el menor tiempo posible sigue siendo una experiencia entretenida y adictiva; aquí encontrarás muchos de niveles con buenos retos.

Habrá un par de sorpresas creadas específicamente para esta consola, la primera es que el efecto 3D es impresionante y gracias a esto las gráficas lucen mejor. La segunda es que puedes usar los controles de movimiento del 3DS para jugarlo, lo que quiere decir que en lugar de usar el circle pad inclinarás la consola en cualquier dirección para dirigir el movimiento de tu personaje. Este tipo de control es intuitivo, responsivo y divertido, sólo que al tenerlo activado necesitarás apagar el efecto 3D, ya que al mover la consola perderás la perspectiva tridimensional.

Todo está muy bien con Monkey Ball, el problema empieza cuando quieres probar los modos Monkey Race y Monkey Fight, y por supuesto, es entonces cuando termina la diversión.

Monkey Race es un juego de carreras en karts que sigue la fórmula que ya todos conocemos. Aquí, hasta cuatro jugadores pueden participar de manera local en una competencia de ocho corredores en nueve pistas diferentes, a lo largo de las cuales puedes encontrar armas para usar contra tus enemigos.

Este modo pudo ser divertido, pero los controles son bastante malos y podrían hacerte pensar que el circle pad del 3DS no es responsivo, cuando realmente es una de las mejores características de la consola. Este modo pasa de ser un excelente extra de la serie para convertirse en algo aburrido por su capacidad para frustrarte.

Monkey Fight trata de emular un juego tipo Smash Bros., pero falla casi en todos los aspectos. En este modo cuatro personajes pelean por ser el mejor recolector de bananas, ya sean las que estén tiradas en los niveles o las que puedas sacar a golpes de otros. Una vez más, los malos controles hacen de esta una experiencia frustrante.

Super Monkey Ball 3D es un buen juego para aquellos que buscan algo clásico, pero en verdad es una lástima que el resultado de los modos Monkey Race y Monkey Fight sea tan deficiente. Definitivamente el título no logra ser el mejor de la serie.