World of Final Fantasy es un título colorido, con sólidas mecánicas de juego y humor apto para todo público. Los paisajes son hermosos, el diseño de personajes es sencillo, pero brillante y su música, un deleite para los que siguen la franquicia desde 1987. ¿El problema? La entrega compite en una era donde los RPG son de mundo abierto o de acción lineal. Eso, desde lo lejos y sin jugar, hace ver al título de Square Enix como un producto del montón pensado para el público japonés, sin embargo, después de 20 horas de juego, llegarás a la conclusión de que World of Final Fantasy es para los que se emocionaron con los Guerreros de la Luz, sufrieron la muerte de Aeris, lloraron el destino de Vivi y ahora esperan con ansia la llegada de Final Fantasy XV. World of Final Fantasy es encantador y profundo para su simple apariencia; su lindura oculta secretos y su dificultad te mantendrá jugando durante muchas horas.

La historia de World of Final Fantasy comienza cuando Reynn y Lann, los protagonistas, despiertan y llevan su día como cualquier otro. Los gemelos, encerrados en la rutina, creen que su vida es normal hasta que Enna Kros, una mujer que no piensa revelar su edad, aparece para llevar su destino por el camino correcto. Ella y un pequeño zorro llamado Tama explican a Reynn y Lann que son Mirage Keepers, personas con la habilidad de controlar criaturas llamadas Mirages. El poder de estos chicos es tan grande, que tenían la posibilidad de dominar el mundo, pero alguien les arrebató sus Mirages y recuerdos; si recuperan a los Mirages, su memoria regresará y cumplirán con su destino. Hasta este momento, World of Final Fantasy recurre al tradicional cliché de los héroes dormidos, sin embargo, su personalidad y el desarrollo de la historia ayudan a pasarlo por alto.

Los primeros pasos de Reynn y Lann los llevan a una nueva tierra llamada Grymoire, donde todos los seres tienen una apariencia pequeña, linda y cabezona. Ahí, los gemelos aprenderán todo lo necesario sobre los Mirages y cómo aprovecharlos; después subirán a un tren para llegar a Cornelia, un reino original de la primera entrega de Final Fantasy, que fue atacado por los soldados de la Bahamutian Army. A partir de este instante el juego une de forma inteligente los universos de Final Fantasy, así que nada se siente forzado. La narrativa lleva un ritmo apropiado para que los elementos se presenten uno tras otro sin saturarte con información y permitirte disfrutar la historia.

El inicio de World of Final Fantasy fluye bajo un esquema sencillo: llegas a una ciudad, conoces la situación, te diriges a un calabozo y empiezas la misión. Durante este ciclo deberás derrotar Mirages salvajes o debilitarlos para atraparlos y unirlos a tu causa. Las batallas con los jefes funcionan para presentar a los héroes de Final Fantasy y conseguir que te ayuden. Lo interesante de este apartado es la manera en que embonan los protagonistas de las entregas más populares de la franquicia, y lo gracioso es que también aparecen personajes de spin-offs, como Dige of Cerberus, a quien jamás imaginaste ver de nuevo y menos en un título de esta clase.

Por otra parte, la relajada atmósfera y los enormes paisajes con los que cuenta World of Final Fantasy se ven opacados por diálogos que al principio parecerán entretenidos pero después serán un dolor de cabeza. Reynn, Lann y Tama hablan hasta por los codos y 65% de las ocasiones, sólo dicen tonterías, especialmente en momentos de tensión. En ocasiones el humor te hará reír, pero también sufrirás por los chistes malos, aunque hay un botón de avance rápido para leer los diálogos en vez de consumir pláticas de entre 4 y 7 minutos que no llevan a ninguna parte. Hay que reconocer el esfuerzo en la localización del juego, en especial por las diferencias entre el humor japonés y el estadounidense; adaptar los diálogos y añadirles coherencia debió ser una tarea muy complicada.

World of Final Fantasy es un JRPG muy profundo, aunque tal vez no lo parezca. El juego es algo más que capturar a los Mirage, pues hay que aprovecharlos en las batallas y liberar sus habilidades. Así como Reynn y Lann, los Mirage también cuentan con niveles de experiencia que suben conforme ganas combates, y tienen fortalezas y debilidades ante elementos comunes dentro del universo de Final Fantasy. Existen 3 presentaciones de los Mirage: pequeño, mediano y grande, lo que sirve para colocarlos en torres de 3, dependiendo de la apariencia de Reynn y Lann. Nos referimos a que, si los protagonistas tienen tamaño “chibi”, debajo podrás poner a un Mirage grande, mientras que arriba irá uno pequeño, mientras que si los gemelos están en su forma “normal”, podrán tener encima a uno mediano y otro pequeño.

Cabe señalar que estos pilares —o tótems, como prefieras llamarles— comparten una barra de salud que es la suma del HP de cada integrante. Por otro lado, es necesario dedicar tiempo a desbloquear el árbol de las habilidades de los Mirage. En un inicio, esto luce como una tarea complicada, pero sólo es necesario combatir mucho y obtener experiencia para desarrollar a la criatura hasta el punto de desbloquear una evolución. De esta forma, es posible obtener un Chocobo de un pequeño pollo con un cascarón en la cabeza o un Behemot de un perrito morado de apariencia inofensiva.

El combate también es muy profundo, ya que tiene el viejo Active Battle System que acompañó a Final Fantasy durante muchos años, pero con unos ajustes para esta época. En la esquina inferior izquierda de la pantalla hay una delgada barra; del lado izquierdo están los rostros de los enemigos y del derecho, el de Reynn y Lann. Cuando comienza la batalla los rostros suben y el primero en llegar a la punta será el que inicie el primer movimiento. Durante el duelo tienes la opción de atacar, defender, desarmar el tótem y capturar a los Mirage rivales, sin embargo, también puedes acceder a un menú clásico al presionar L1 donde tienes acceso a las habilidades, los ítems y las demás opciones.

Al principio, los combates serán muy parejos y si dedicas tiempo a subir de nivel a tus personajes, las cosas serán mucho más sencillas. No es que esto sea malo, pero es un detalle que siempre ha tenido quejas porque “grindear” durante mucho tiempo se traduce en simplificación de la experiencia. Por otro lado, cuando enfrentas algunos Mirage genéricos o que ya tienes en tu poder, el combate se reducirá a presionar el botón de triángulo para que las cosas sean más simples. Si quieres acelerar la experiencia, igual que con los diálogos, sólo es necesario presionar R1. Gracias a esto, el tiempo de juego se reduce considerablemente. Los tótems no son invencibles, pueden desbalancearse y caer, lo que deja a los integrantes desprotegidos con una barra de salud cada uno, y puede caer de un solo golpe. Aquí, es importante recuperar el balance usando magia o ítems.

World of Final Fantasy no sería un JRPG completo si no tuviera sus respectivos calabozos. No hablamos de mazmorras o lugares lúgubres donde combates a tu suerte, sino de escenarios lineales y pequeños que debes recorrer de una esquina a otra para que aparezcan enemigos y así subir experiencia. Todos tienen, al menos, un puzzle que resolver y un ítem para desbloquear un camino que te lleve a tu destino. En la mayoría de los casos sigues un patrón donde es imposible perderte, pero en otros quizá tengas que pensar muy bien cómo resolver un acertijo para seguir adelante. La realidad es que no se quebraron la cabeza en este apartado porque es la misma mecánica siempre, sólo con algunos ajustes. Tal vez los puntos más atractivos de los calabozos sean su apariencia y calidad en el detalle, ya que son fieles a la atmósfera que ofrecen los distintos juegos de Final Fantasy.

Los calabozos son flojos en World of Final Fantasy debido a que son lineales y repetitivos.

Un punto que no debes perder de vista es que World of Final Fantasy es un título pensado para el PS Vita, y por eso tiene mecánicas sencillas y procesos cortos o acelerados. En el apartado gráfico, la edición de PlayStation 4 destaca notablemente y los modelos CGI son decentes, pero los diseños de casi todos los personajes son muy sencillos. Donde se nota más trabajo y detalle es en los héroes de las demás entregas de Final Fantasy. La apariencia “chibi” no les quita personalidad. Para brindar más de variedad, el juego cuenta con animación tradicional, que no le pide nada a la animación por computadora.

La calidad del audio en World of Final Fantasy cumple su cometido. Los combates no se oyen saturados, la música se escucha perfectamente y el trabajo del doblaje es notable. No habrá algún momento en que el audio esté desfasado o con errores. El único problema del JRPG es que no está localizado al español. Tal vez para cierto público esto no sea importante, pero para otro puede ser básico. También hay malas noticias si no te gustan las voces en inglés porque sólo las ediciones especiales tienen audio en japonés por defecto.

World of Final Fantasy es un título nostálgico, con todos los elementos que tenían los JRPG en la década de los 90 y su diseño tiene ajustes para que cualquiera que no vivió esa era también lo disfrute. El mayor problema de esta entrega es que el ritmo de la narrativa e incluso la historia se ven opacados por las tontas pláticas de los protagonistas y creemos que la razón por la que Square Enix tomó esta decisión es querer que World of Final Fantasy fuera una experiencia ligera que todos pudieran disfrutar. De ahí en fuera, tendrás un título completo con sólidas mecánicas de juego, un sistema de combate interesante y una historia con un desenlace apresurado. Si te consideras un seguidor de Final Fantasy y añoras las primeras 9 entregas de la serie, este juego es para ti.