Cuando algo está de moda tenemos la tendencia a aporrearlo hasta que deja de tener sentido, después lo seguimos aporreando hasta que queda irreconocible, y por si fuera poco, lo seguimos aporreando hasta que nos quedamos sin algo por aporrear.

Así es como el apocalipsis zombi sale hasta en los cereales y el juego más reciente en abusar de la moda es Dead Block. Nos vamos a ahorrar la parte de la historia, sabemos que se acabó el mundo, zombis, sobrevivientes, matar zombis… bye.

La particularidad de Dead Block es que estás encerrado en una casa y debes construir bloqueos para evitar que entren los zombis y trampas para que cuando lo hagan se enfrenten a una muerte graciosa. Un dato importante que hay que considerar es que para tener la madera necesaria y poder crear tus defensas necesitas destruir todos los muebles de la casa, y a fin de que puedas matar a todos los zombis necesitas reunir tu set de rock y tocar una canción, ya sabes, apretando botones en sincronía conforme lo ves en pantalla; si lo haces bien, los no-muertos serán eliminados de la faz del planeta y estarás listo para avanzar a otra casa.

Sí, es tan tedioso como se lee.

El juego se va en balancear el hecho de recopilar madera con armar o reparar defensas. Si logras ser muy eficiente, no tendrás problemas y a los pocos minutos el nivel en el que te encuentras no tendrá el menor reto para ti. Si no logras coordinar bien tus tareas, será muy difícil y frustrante, y no hay piso medio, eres uno o lo otro.

Después de dos niveles todo resulta tedioso en extremo, y se convierte en una carga más que en una diversión. La tensión que debería dar el saber que los zombis están por llegar se transforma en un peso enorme porque tienes que construir más trampas.

A tu disposición hay tres personajes: una policía de crucero, un constructor y un niño. Los tres tienen habilidades especiales que son igual de aburridas. Jugarás hasta terminar la campaña de dos horas o hasta hartarte, y lo más seguro es que te aburras y lo dejes en unos diez minutos.

En serio, el juego es tan tedioso que escucharás sólo dos canciones: una al principio del nivel y otra al final del mismo. Una y otra vez.

No hay una causa secreta detrás del fallo tan miserable de un juego que tiene como temática un grupo de personas encerradas en una casa, donde se combinan, además, rockabilly, zombis y la destrucción a martillazos de todos los muebles que están en el interior, y si lo que buscas es aburrirte como pocas veces en tu vida, y vivir para contarlo, Dead Block definitivamente es tu salvación.