Gravity Rush llega como una pieza completamente original, y que muestra la moderna escuela japonesa de arte, con personajes estilizados y un diseño que te hará pensar que estás frente a un anime con rasgos característicos de las historietas digitales, donde cada panel complementa al anterior. Este mundo enorme te recordará, además, un poco el estilo steampunk.

La historia es simple: controlas a Kat, una atractiva chica que despierta con amnesia en un lugar desconocido y acompañada por un singular gato con la habilidad de hacer cambios en la forma en que interactúas con la gravedad. Una vez que has aprendido a usar tu nuevo poder, descubres que la ciudad está bajo el asedio de extrañas criaturas que tienen el poder de modificar el entorno y por esa razón hay desastre y destrucción por donde quiera que pasan. Al parecer, eres la única persona con el coraje para enfrentarlos y es lo que te conduce a una travesía para conocer tu pasado y entender por qué la gente se refiere a ti como la reina de la gravedad.

Hasta ahora, Gravity Rush puede parecer un juego genérico más, pero con particularidades que lo hace resaltar y podemos decir que se agradece la decisión de desarrollarlo para Vita y no para PS3, como estaba planeado al principio. El sistema de controles es muy sencillo: cada botón tiene una asignación y no tendrás que complicarte con comandos difíciles o secuencias interminables de presión de botones; si a esto le añadimos los controles únicos del PS Vita, tenemos como resultado una nueva y divertida experiencia.

En cuanto controles la gravedad para desplazarte usarás los sticks para dirigirte; tu guía será una retícula que apunta en la dirección que hayas elegido, aunque si quieres experimentar todas las características del Vita, simplemente gíralo y apunta su sensor de movimiento para que la retícula se mueva en cualquier dirección, el sistema responderá perfectamente. El problema es que muchas veces la cámara no coopera contigo y al girar la retícula, la cámara hará movimientos diferentes, lo que te dejará a la deriva y sin conocer tu dirección; esto se soluciona reseteando la gravedad, pero puede ser un problema si estás en combate.

Ya que hablamos del combate, la habilidad de controlar la gravedad también te otorga poderes especiales que irás desbloqueando en el transcurso de la historia. Cada poder te permite atacar el ridículamente visible punto débil de todos los enemigos: un círculo gigante pegado al cuerpo o a la cabeza de las extrañas criaturas, lo que difícilmente pasarás por alto. Una vez que estés flotando podrás arremeter contra esos seres con una patada, lanzando objetos o creando campos de gravedad que infligirán gran daño, pero para que funcione es indispensable dirigir todo tu poder hacia el punto rosa brillante que tus enemigos tratarán de ocultar, sobre todos los jefes, cuyas dinámicas de combate son de las más divertidas que hemos visto en mucho tiempo.

Repartidas por el mundo encontrarás gemas, útiles para subir de nivel tu ataque y aumentar tus habilidades y la rapidez con la que se llena tu barra de gravedad. El sistema para elevar tu nivel es simple y amigable, no tendrás que preocuparte por escoger la habilidad correcta, ya que mientras recolectes una buena cantidad de gemas, subirás de nivel rápidamente.