Como parte de una columna difundida recientemente, Warren Spector, figura del desarrollo quien recientemente vio el cierre de su estudio, Junction Point, lamentó otra vez que los videojuegos sigan enfrascados en las mismas temáticas e instó a los adultos de la industria a hacer acto de presencia.
Como medio, permanecemos enredados en la acción y los convencionalismos del género. Incluso lo que quiere hacerse pasar por seriedad en los videojuegos populares parece requerir de zombies, asesinos seriales, extraterrestres o demonios para atraer una audiencia, explicó Spector. Si dijera que quiero hacer un juego sobre rescatar rehenes en Irán sin armas asumiendo que pudiera descifrar cómo hacer ese juego me correrían de la sala de juntas, entre carcajadas, añadió. El grueso de contenido que los desarrolladores de juegos pueden explorar es sofocantemente angosto.
El creador de Thief y Deus Ex calificó de pobres o falsas las excusas que sostienen que los videojuegos sólo pueden retratar violencia, que el medio es muy joven o que los jugadores son adolescentes. ¿Dónde, me pregunto, están los adultos del videojuego?, agregó en forma retórica y con ello cerró su reflexión.
Warren Spector ha sido muy enfático a la hora de manifestar su inconformidad con el estancamiento creativo de la industria y el abuso de la violencia desde el E3 pasado, y para ilustrar su punto, a menudo se remite al ejemplo de Lollipop Chainsaw, juego que asegura nunca debió hacerse.
El creador de Epic Mickey no está solo en su reclamo. Jade Raymond, directora de Ubisoft Toronto también ha criticado esta supuesta obsesión por la violencia y los temas beligerantes en el transcurso del último año.
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