Uno de los lanzamientos más controversiales del año es sin duda Call of Duty: Infinite Warfare en PC. Desde los problemas que usualmente aparecen en los port de juegos AAA últimamente, añade otro más como el no tener servidores dedicados ni en Modern Warfare Remastered (Cosa que sí ofrecía la versión original) y, probablemente el más grande, separar a los jugadores de la versión de Windows 10 y Steam.
Esto ocasionó que esa versión estuviera completamente vacía en el multijugador, y los usuarios tienen tantos problemas al encontrar a otros jugadores que comenzaron a ofrecer reembolsos por los problemas.
Sin embargo, Microsoft ha apuntado dedos a Activision, ya que según ellos dicen: “Activar el soporte multiplataforma en programas de Windows 10 para que sean compatibles con otros sistemas es responsabilidad de la compañía” y aseguran que ésta no lo hizo.
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