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78 años es lo que tiene el famoso director, quién ha tenido un legado indudable, sus trabajos han recorrido el mundo y son capaces de entregar grandes momentos a los seguidores y espectadores de su obra. Hayao Miyazaki fue siempre una gran promesa, quién trabajó en Toei Animation desde 1963 y con ello no vería límite alguno en lo que continuaría su obra.
Trabajó junto a Isao Takahata (difunto desde el año pasado), trabajó como animador, participó en la recordada Heidi y Conan, el niño del futuro. Los años pasaron y gracias a obras como Nausicaä del valle del viento, veríamos el puntapié de Studio Ghibli como lo conocemos hoy.
Su legado es capaz de contar muchas cosas, por ello recordemos un par de películas que a todos nos han marcado y si aún no has podido ver... ¡Esperamos darte un buen par de motivos para que no te la pierdas!
Si, obviamente estaría Totoro:
Estrenada el año 1988, Mi vecino Totoro (Tonari no Totoro) es probablemente la más reconocida película del estudio que fundó el genio y talentoso Hayao. Ligera, agradable, no muy extensa, ni muy corta, Mi vecino Totoro te cuenta las aventuras de una familia que tras una mudanza tenemos a un padre que debe cuidar a sus hijas y ellas, en medio del descubrimiento del mundo que las rodea, se topan con un grupo de criaturas fascinantes, entre ellas, Totoro claramente. La magia que la película entrega es algo que puedes disfrutar sin importar la edad que tengas, es indudablemente la puerta de entrada al universo que Ghibli brindaría (sí bien hay otras películas antes, es una de las principales obras que debes conocer, incluso en el cine a nivel general).
¿Sabías que Hayao Miyazaki no hace guiones? El 2001 durante una entrevista en Francia dió a conocer tal hecho a nivel "público", desde entonces es que podemos ver cada cierto tiempo esa historia rondar por la internet a modo de viral, pues Miyazaki denunciaría no tener tiempo para aquello y que la historia comenzaría a tomar forma a medida que el va dibujando los storyboards, seguido de la producción.
"¿Cómo sabemos que las películas valen la pena?" dijo una vez Miyazaki, criticando la situación actual de las películas y el cine.
Dejando atrás el gatobus... Con Miyazaki emprendemos un viaje por los aires, no sólo con un castillo en el cielo, o una aprendiz de bruja repartiendo entregas a domicilio, se trata de un aviador:
Porco Rosso
La película del personaje que dijo "prefiero ser un cerdo ser un fascista" y originalmente llamada Kurenai no buta (1992) es una película que nos posicionó en la historia de un piloto, claramente italiano, que dejo el ejército, se convirtió en cerdo, realizó una que otra promesa sobre un jardín y que lo llevó a una vida de cazarrecompensas, donde tendría por antagonistas a unos -muy honrados- piratas (Mamma aiuto). Una película que nos muestra una historia impresionante donde tenemos a alguien entregado a sus convicciones, a su pasión, a su trabajo como tal, un "cerdo" pero honrado. Llamando al pacifismo y criticando el totalitarismo, Miyazaki en 94 minutos nos entregó una obra maestra del cine moderno, una película que no te puedes perder por el mensaje, ¿son realmente los piratas los malos en la película? Resulta complicado hablar de ella, contar de su trama y no "hacer un spoiler", pero veremos a este cerdo (antes conocido como Marco Pagot -y sí, conlleva un tributo-) enfrascarse en una seguidilla de combates aéreos que lo llevarán a dejar su lugar, viajar junto a una joven mecánica, trazar una apuesta vital y sorprender a su audiencia, Porco Rosso y su hidroavión tendrán una gran aventura, que rumoreó tener secuela, pero fue desmentido. Un dato interesante es que tenía inicialmente un tinte comercial y sería producida para una aerolínea, pero se convirtió en un largometraje donde tal aporte fue destinado a producción y la obra es hoy en día recordada a nivel mundial.
La princesa Mononoke / El viaje de Chihiro
Ghibli siempre nos presentó a mujeres independientes, empoderadas, fue un estudio adelantado a su época y claramente se debía a la mente maestra que tenía, Hayao Miyazaki tendría otras películas, pero La princesa Mononoke y El viaje de Chihiro trascenderian con una mujer guerrera y otra que sería capaz de entregarse a duros trabajos por rescatar a sus seres queridos, ambas protagonistas tendrían un gran deber en sus hombros, entre magia y espíritus, San, la chica criada por una diosa loba se enfrentaría en una cruzada por recuperar el bosque para las criaturas y dioses que en el habitan, Chihiro debería hacer frente a los errores de sus descuidados padres y sufrir la discriminación de un mundo plagado de magia y privilegios, donde el amor -en diversas percepciones- sería el motor que la fortalecería y permitiría aventurarse en lugares donde un humano no podría. San por su parte también tendría un amor, a su tierra, a su gente, a su bosque, pero en ella habría una ferocidad al actuar que brindaría un nuevo orden gracias a una princesa que no se necesita estereotipar para atraer audiencia, El viaje de Chihiro ganó un Óscar el 2002 a mejor la mejor película de animación, en su momento recibió 35 premios y con ello, un legado que permite que hasta el día de hoy sea exhibida en cines con funciones repletas de personas que llevan a jóvenes a conocer la cinta, incluyendo también grandes que van a repetir la experiencia que tuvieron, quizás desde otra perspectiva, incluso.
Gake no ue no Ponyo
La ecología también estuvo presente, en realidad, casi siempre hay mensajes de preservación en sus cintas, así como de igualdad y más, pero Ponyo en el acantilado (o Ponyo y el secreto de la sirenita) es algo que mezcla la magia con la realidad, una necesidad de cuidar a la humanidad, o más bien... ¡Al mundo de la humanidad! Pero todo aquello de una forma que te educa, pero más te entretiene, te instruye en esta historia donde una "coincidencia" llevó a este pez a ser una niña y que de tal forma un descuido desate la necesidad de expandirse de los mares, pero su amistad junto la de un jóven puedan, gracias al amor, salvar el día, de todas formas nos presenta obviamente a un "villano", que no estaba tan equivocado, y en realidad de malo no tenía nada, pero siempre hay una mejor forma de hacer las cosas, Japón nos deja así una enseñanza, respeto y una obra maestra del siglo.
Realmente no hay más que decirle a Hayao Miyazaki: gracias por tanto, perdón por tan poco. El mundo le debe mucho, la humanidad, el cine, las artes.
Si tienes ganas de ver en el cine alguna de estás películas, no dudes en acercarte al Cine arte Normandie, pues tiene funciones de Porco Rosso, El castillo ambulante, Mi vecino Totoro, Ponyo y El Viaje de Chihiro en el corto plazo (consideramos hasta 2 meses de cartelera). Por el costo de 1.000 CLP podrás acceder a verlas y de verdad, es una gran experiencia el tenerlas en pantalla grande. Puedes hacer click al nombre de cada película para acceder a su función o hacer click aquí al nombre del cine para así llegar a más información.
Si eres de los coleccionistas y no te gusta la piratería, no podemos evitar recomendarte la única tienda prácticamente dedicada en lo absoluto a Studio Ghibli en Chile, Katsu Toys Store, que trae productos desde el museo de Studio Ghibli en Japón, entre otros productos oficiales.
También este año hemos tenido grandes "estrenos" de Studio Ghibli en el cine chileno, y bueno, sus cercanos, que la distribuidora Cinetopía nos ha brindado, El cuento de la princesa Kaguya por ejemplo fue uno de ellos, donde Isao Takahata nos dejó su último legado.
¿Cuál es tu película favorita de Hayao Miyazaki? ¿Alguna marcó tu vida?
¡Ah y claro! No olvidemos que si te quieres interiorizar más en la obra del destacado director, puedes ver un gran documental al respeto, te lo dejamos en Youtube (no en la mejor calidad) para que lo puedas ver libremente y subtitulado.
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