Como hemos contado varias veces en Tarreo, el ser un fan de los videojuegos a estar dentro de esta importante industria del entretenimiento, creando uno propio, muchas veces está solo a un paso. Una de estas historias es la del creador del juego Forgotten City, llamado Nick Pearce, quien pasó de ser un abogado de una empresa de tecnología y fanático de los mods de The Elder Scrolls V: Skyrim, a incluso estar nominado en los Game Awards por su creación.
Todo comenzó cuando durante el año 2011, Pearce trabajaba como abogado para una empresa de tecnología en Melbourne, Australia, dedicando su tiempo libre a jugar videojuegos y además escribir novelas. Uno de sus títulos favoritos era Fallout: New Vegas, juego con el que comenzó su interés en los mods, descubriendo el mod New Vegas Bounties, creado por el usuario Someguy2000. Según cuenta, esto lo dejó completamente impresionado, comentando en alguna ocasión que "Fue una revelación que un mod pudiera ser tan bueno o incluso mejor que un DLC oficial, y una excelente manera de contar una historia de primer nivel".
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Creando un mod de Skyrim exitoso
Un año después de esto y con The Elder Scrolls V: Skyrim ya en el mercado, este fan conoció el Creation Kit lanzado por Bethesda, el cual permite la creación de mods y que fue la herramienta con la que Pearce comenzó su travesía dentro de este tipo de contenido. Y como muchos de los jugadores que se pasan a ese lado, no sabía demasiado de desarrollo de videojuegos, por lo que aprendió de forma autodidacta, pasando los siguientes tres años alternando su pasión por los mods con su trabajo como abogado.
Trabajo en los mods que es tan grande y apasionado, que terminó lanzando uno que cuenta con un guión de 35,000 palabras, diálogos doblados y su propia banda sonora, siendo reconocido en el 2015, cuando recibió el prestigioso premio Australian Writer's Guild por su brillante trabajo, siendo el primer mod en recibir tal honor. Mod que llegó a tener una popularidad tan grande, que el siguiente año, el equipo de desarrollo de League of Geeks, creadores de Armello, se puso en contacto con Pearce para proponerle convertir su mod en un videojuego independiente.
Pasando a algo más grande
Nueva aventura en la que se embarcó usando sus ahorros, contratando al programador Alex Goss (Earthlight) y al artista John Eye (Hand of Fate 2), buscando crear un juego que se alejara de lo que se presentaba en Skyrim, llevando,dejando de lado el género de fantasía y apostando por algo más relacionado con la Antigua Roma. Otra cosa que se tomó bastante en serio, ya que para esto, Pierce se puso en contacto con el Dr. Philip Matuszak, de la Universidad de Cambridge, para poder obtener datos históricos precisos, generando una buena conexión con él ya que además era aficionado a Guild Wars.
Al final, la trama se amplió tanto que pasó de 35.000 a 80.000 palabras, desarrollando The Forgotten City por cuatro años y medio, trabajando a veces una media de unas 80 horas a la semana, dentro de un proyecto demasiado arriesgado ya que había usado sus ahorros y dejado su trabajo diario como abogado. Pero todo tuvo un buen desenlace, ya que en el 2021 terminaron The Forgotten City, publicándolo en todas las plataformas, llegando a tener un puntaje en Metacritic de 84 en PC, teniendo en Steam más de 7.000 reseñas de usuarios, de las cuales el 96% son positivas.
Una historia increíble que como adelantamos, lo llevó a estar nominado como mejor juego indie en los Game Awards del 2021, al igual que en los premios D.I.C.E. Awards y los BAFTA de 2022.
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