La Xbox Series S, la versión más económica de la Xbox Series X, presenta varias diferencias clave que la hacen menos potente. Entre estas se encuentran una menor memoria RAM y de video (10 GB frente a 16 GB), un procesador con solo un tercio de la capacidad de la Series X, y su disponibilidad únicamente en versión digital.
Debido a estas limitaciones, muchos desarrolladores, a lo largo del tiempo, han manifestado su frustración con el arduo trabajo necesario para adaptar los títulos diseñados para la Series X a la versión menos potente. Recientemente, Del Walker, un veterano de la industria, ha reavivado el debate al expresar su descontento y afirmar que la Xbox Series S nunca debió haber existido.
A diferencia de un PC, donde la diversidad de hardware es lo común y ofrece una mayor flexibilidad en el ajuste de requisitos, trabajar con dos versiones de una misma consola exige ajustes específicos que pueden ser extenuantes para los desarrolladores. El problema principal radica en que los desarrolladores deben optimizar sus juegos para que sean compatibles tanto con la Series X como con la Series S, incrementando el esfuerzo de desarrollo y pudiendo afectar la calidad final del juego.
Con estos problemas en mente, muchos lanzamientos son evitados o retrasados por culpa de la consola, como se evidenció en un post en X que resumía las actuales dificultades que enfrentan los jugadores de Xbox.
En este contexto, Del Walker, el ex desarrollador de Naughty Dog que ha trabajado en títulos destacados como Batman: Arkham Knight y Star Wars Jedi: Survivor, aprovechó de expresar su descontento: “Ojalá nunca hubiera existido la Xbox Series S. Es tan molesto tener que optimizar para esta consola.”
Walker también sugirió que en el futuro podrían aparecer grandes lanzamientos de juegos que no estarán disponibles para los jugadores de Xbox debido a estas complicaciones. Aunque Walker aclara que no tiene problemas con la Xbox Series X, sí manifiesta su desagrado por las dificultades que la Series S representa en el proceso de optimización.
La Xbox Series S, a pesar de su atractivo precio, plantea desafíos significativos para los desarrolladores al requerir adaptaciones que pueden afectar la calidad de los juegos y su disponibilidad.
El desarrollador de Dying Light afirma que los juegos más cortos de 18 horas son "el futuro": "una experiencia más compacta, sin relleno innecesario”
En una conversación reciente con GamesIndustry.biz, Tymon Smektała, director de la franquicia Dying Light en Techland, ha compartido su perspectiva sobre el futuro de los videojuegos, sugiriendo que las experiencias más compactas, como Dying Light: The Beast y sus más de 18 horas de juego, podrían ser el camino a seguir.
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