Empresa "robó" la marca Flappy Bird a su dueño por no usarla en 10 años y relanzará el título como un juego NFT

El otrora mega popular y viral juego móvil Flappy Bird, que cautivó y frustró a millones de jugadores en 2014 antes de ser repentinamente retirado por su creador, Dong Nguyen, está a punto de hacer un regreso que se avecinaba sería triunfal. Sin embargo, su retorno está desalentando a muchos, ya que además de que la marca del juego ha cambiado de manos desde entonces, ahora el título llegará con un enfoque en las tecnologías blockchain y web3, seguramente convirtiéndo a Flappy Bird en un título NFT.

Un grupo autodenominado "The Flappy Bird Foundation Group" ha anunciado planes para relanzar el juego en plataformas Android e iOS en 2025. Esta fundación, liderada por el diseñador de juegos Michael Roberts, autodenominados como un "equipo de fans apasionados comprometidos con compartir el juego con el mundo", ha adquirido los derechos de Flappy Bird. Sin embargo, surgen interrogantes sobre la participación de Nguyen en este nuevo proyecto. Según indican en The Verge, intentaron contactar al desarrollador original para obtener comentarios, pero hasta el momento no han recibido respuesta.

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Pero por otro lado, varios reportes indican que Roberts, director del estudio 1208 Productions, ha sido claro sobre el papel de su empresa en el resurgimiento de Flappy Bird. 1208 Productions, conocida por su trabajo en el espacio web3 y proyectos de NFT, ha generado millones de dólares en ingresos, según informes. Las conexiones de la compañía con figuras controvertidas como Jordan Belfort, la inspiración real para la película "El Lobo de Wall Street", también han suscitado preguntas.

Un desarrollador denunció en su cuenta de X, que: "La marca registrada Flappy Bird parece haber sido tomada de manera hostil después de 10 años de inactividad, y su cuenta de Twitter se hace pasar por el juego original y/o el creador".

Además, el investigador canadiense de ciberseguridad, Varun Biniwale, descubrió una página oculta en el sitio web de Flappy Bird que revela las ambiciones cripto del juego. La página, que no era fácilmente accesible desde el sitio principal, describe los planes para convertir a Flappy Bird en el primer juego del mundo de código abierto, propiedad de la comunidad, tanto en web2 como en web3. También promete "airdrops gratuitos" para los suscriptores del boletín y presenta términos y opciones relacionadas con criptomonedas.

Biniwale también encontró una versión jugable del juego y una tabla de clasificación poblada por usuarios con nombres relacionados con criptomonedas.

Algo que como adelantamos, al final ha generado preocupaciones sobre la monetización del título y la creciente tendencia de incorporar tecnología blockchain en los videojuegos. Los críticos argumentan que este enfoque en el beneficio financiero, está erosionando los aspectos creativos de la industria gamer.

Nueva investigación confirma que el 95% de los NFT no valen nada

Los NFT, conocidos como tokens no fungibles, parecen estar en un estado de declive notorio. Según una investigación reciente, estos activos digitales han perdido gran parte de su valor y atractivo en el mercado.

El auge de los NFT comenzó en 2017, pero alcanzó su punto máximo de popularidad en 2021 y 2022. Sin embargo, los tiempos han cambiado drásticamente. Un ejemplo citado en el informe es el caso de Justin Bieber, quien en enero de 2022 gastó 1,3 millones de dólares en una obra de arte de Bored Ape Yacht Club, que supuestamente ahora vale menos de 60,000 dólares en julio de 2023.

Un informe de DappGambl, una comunidad especializada en finanzas y tecnología blockchain, arroja luz sobre la situación actual de los NFT. Según el informe titulado "DEAD NFT: el panorama en evolución del mercado de NFT", después de analizar 73,257 colecciones de NFT, se descubrió que 69,795 de ellas tienen una capitalización de mercado igual a cero Ether (ETH), la segunda criptomoneda más popular después de Bitcoin. En otras palabras, el 95% de las NFT no tienen valor en el mercado actual, lo que contrasta fuertemente con el auge de 2021, cuando se valoraron en 17 mil millones de dólares.