Durante años, los juegos exclusivos fueron un pilar central en la competencia entre plataformas, permitiendo que consolas como Xbox y PlayStation ofrecieran experiencias únicas que incentivaban a los jugadores a elegir una sobre la otra. Sin embargo, recientes informes y declaraciones de figuras clave en la compañía indican que los títulos de primera parte de Xbox están siendo planificados para lanzarse también en PlayStation, eliminando una de las barreras más tradicionales en el mercado.
El periodista Jez Corden, editor ejecutivo de Windows Central, afirmó en una serie de publicaciones en X que “Xbox no tendrá exclusivas en el futuro”, agregando que “todo será exclusivo por tiempo limitado, como máximo”. Corden explicó que si algunos juegos permanecen exclusivos, será de manera incidental y en casos muy puntuales, mientras que la mayoría de los títulos seguirán un modelo multiplataforma.
Al responder sobre la llegada de Fable a PlayStation, mencionó: “Ese juego era monstruosamente caro. Puede que no sea el primer día, pero vendrá con el plan actual en mi opinión”.
Esta postura se suma a las declaraciones de Phil Spencer, CEO de Microsoft Gaming, quien en febrero anunció la llegada de varios juegos de Xbox a PlayStation y Nintendo Switch. Títulos como Pentiment, Hi-Fi Rush, Sea of Thieves y Grounded marcaron el inicio de este cambio, además, Doom: The Dark Ages fue confirmado para PS5, y el próximo juego de Indiana Jones también estará disponible en la consola de Sony en 2025.
Matt Booty, presidente de contenido y estudios de Microsoft, también reafirmó este enfoque, asegurando a Variety que las decisiones sobre exclusividad se toman “juego por juego” y dependen en gran medida del cronograma de producción. “Queremos asegurarnos de que la experiencia en Xbox sea excelente, y luego el tiempo entre lanzamientos en otras plataformas depende tanto de la producción como de cualquier otra cosa”, explicó.
Este cambio refleja una tendencia creciente en la industria de los videojuegos, donde las fronteras entre plataformas se han vuelto menos definidas. Si bien algunos jugadores pueden llegar a expresar descontento por la pérdida de exclusividad, Microsoft argumenta que este movimiento permite llegar a una audiencia más amplia, mejorando la accesibilidad y el crecimiento de su ecosistema.
El fin de los exclusivos de Xbox marca un giro inesperado en la estrategia de Microsoft, que ahora prioriza la expansión sobre la exclusividad. Solo el tiempo dirá si fue una decisión acertada y si el resto de la industria optará por seguir su ejemplo.
La Xbox Series S ha demostrado ser un muy buen PC gamer compacto que cuesta tan sólo $250 dólares
Desde su lanzamiento, la Xbox Series S ha sido objeto de numerosas críticas, incluso tratada como el “lastre” de la actual generación. Pero según un análisis de un medio gamer, con un precio rebajado a tan solo $250 dólares, esta plataforma es no sólo una opción para jugar títulos actuales económica y versátil, sino que también una alternativa funcional a un PC gamer básico.
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